El 60% de la población de Andes vive en la zona rural y muchos de ellos no contaban con agua potable, lo que generaba enfermedades y contratiempos para acceder al servicio.
Pues bien, gracias a la construcción de los planes maestros de acueducto y alcantarillado, las familias ya no tienen que hervir el agua para consumirla.
Un trabajo, que permite mejorar la calidad de vida de las familias andinas campesinas.