Los patrulleros Fredy René Lázaro Palencia y Juan Carlos Baena Rivera, fueron enviados a la cárcel por, presuntamente, haber exigido dinero a comerciantes del centro de la ciudad bajo la amenaza de cerrarles sus establecimientos o sancionarlos por faltas al Código Nacional de Policía.
Adicionalmente, el patrullero Wílliam Alexis Bello Sosa recibió medida de aseguramiento en su lugar de domicilio por el delito de concusión, mismo delito que se le atribuye a Lázaro Palencia y Baena Rivera.
Respecto a la situación, Natalia Rendón, directora seccional de Medellín de la Fiscalía General de la Nación, señaló:
Los procesados fueron capturados por miembros de la Sijin de la Policía Nacional, y no se allanaron a los cargos imputados por el delito de concusión en concurso homogéneo y sucesivo. La defensa de los investigados apeló la decisión de primera instancia.