El Hospital San Vicente y la Fundación Huellas Sanadoras, implementaron después de tres años de trabajo conjunto el programa de intervención asistida con animales, que consta en que perritos puedan ayudar al personal de salud y pacientes, a aliviar el estrés generado por su labor y brindar tranquilidad ante el panorama de las hospitalizaciones.
Por: Santiago Yepes
Vitta, Oso, y Otto, han sido entrenados para hacer parte del programa de intervención asistida con animales, propuesta por el Hospital San Vicente en alianza con la Fundación Huellas Sanadoras.
“La naturaleza nos ha dado la oportunidad de contar con otros seres que nos pueden retornar al equilibrio, y que, llevándolas hasta los servicios, pueden desconectar como de la rutina del día y empezar a tener otro tipo de pensamientos que oxigenen la rutina”, señaló Isabel Arroyave, jefe de Experiencia del Paciente del Hospital San Vicente Fundación.
Se pretende generar empatía entre las mascotas, el personal de salud y los pacientes. Una actividad que sirve para dispersar la mente y potenciar habilidades que se hayan afectado por alguna enfermedad.
“Básicamente hace que las personas quieren participar, porque no se sienten en una terapia, sino que sienten que están ayudando a otro. En este caso, en los perros, un ser con el que llevamos treinta mil años evolucionando juntos, con los que se ha construido un vínculo muy fuerte, muy estrecho, y en sí, la sola presencia de un perro, dinamiza procesos”, agregó Eugenio Henao, director de adiestramiento de la Fundación Huellas Sanadoras.
Cada viernes estos tres caninos visitan las instalaciones del San Vicente Fundación. Con la llegada de más voluntarios y perros, la iniciativa se podrá extender a más áreas del hospital.