El Gobierno Nacional expidió el decreto 601 de 2020, que asigna funciones al Alto Comisionado para la Paz con el fin de verificar la voluntad real de paz y reinserción a la vida civil, así como la voluntad real de sometimiento a la justicia de los grupos armados organizados presentes en el territorio nacional.
La posibilidad de sometimiento es para el ELN, disidencias de las FARC, el Clan del Golfo, los Pelusos y los Caparros.