Laureles continua siendo foco de inseguridad y el lugar para que los delincuentes hagan de las suyas. El caso más reciente se presentó ayer con el hurto de dos cadenas de oro y una pulsera, al jugador del Amiens de la Liga Francesa, Jhon Stiven Mendoza.
Pero este no es el único caso, habitantes, transeúntes y comerciantes de este sector denuncian el malestar de esta situación y la sensación de temor con la que viven a diario.